Siguiendo con el análisis de las enfermedades del oído, hoy vamos a ocuparnos de 2 patologías mucho más comunes de lo que se cree: el tinnitus o acúdenos y el síndrome de Menière.
El tinnitus o acúfenos son ruidos en la cabeza, que no tienen nada que ver con una cuestión psiquiátrica. El ruido se puede oír en cualquier parte de la cabeza, o en uno o ambos oídos.
Imagine un zumbido o silbido constante en los oídos, 24 horas al día. Esto se denomina tinnitus o acúfenos. Nunca puede descansar, siempre está ahí. Nadie más puede oír el ruido ya que no proviene de ninguna fuente externa. Aunque es la única persona que puede oír el ruido no se trata de su imaginación.
Casi todo el mundo ha experimentado tinnitus de forma temporal. Por ejemplo, durante algunas horas después de un concierto o en cualquier otra ocasión en la que nuestros oídos se han expuesto a ruido.
El tinnitus se convierte en un problema si este ruido persiste y/o aumenta. Normalmente, el pitido de los oídos desaparece, pero también puede llegar a ser permanente. La mayoría de las personas que sufren tinnitus lo consideran muy molesto e incómodo.
El tinnitus ocurre habitualmente en personas de más de 40 años, pero se está convirtiendo en algo cada vez más frecuente entre los jóvenes debido al aumento de los niveles de ruido diarios, incluyendo los causados por el uso incontrolado de los MP3, iPods y equipos de música individuales.
Aunque el tinnitus es más común entre personas con pérdida de audición, cualquiera puede padecerlo. También es posible padecer una pérdida de audición severa sin tener en ningún momento tinnitus.
En algunos casos, es aconsejable el uso de audífonos equipados con un generador de ruido blanco que ayudar a mitigar el acúfeno. Pregúntenos si es su caso para que podamos explicarle con más detalle en qué consiste este tratamiento.
La enfermedad de Ménière es un trastorno del oído interno. Se caracteriza por vértigo, pérdida de audición, presión o sensación de plenitud en los oídos y tinnitus. El paciente sufre ataques graves y muy molestos que son impredecibles y pueden durar de dos a veinticuatro horas.
La enfermedad de Ménière es una enfermedad crónica relacionada con un trastorno del sistema vestibular del oído interno, denominado hidrops o hidropesía endolinfática, que produce un exceso de fluido en el oído interno. Cuando el sistema linfático se dilata, puede producir alteraciones en las fluctuaciones del fluido endolinfático, recubriendo las estructuras de la audición y del equilibrio, y causando la enfermedad de Ménière. Puede producirse por un golpe en la cabeza, por deterioro del oído interno, infecciones, alergias o por causas desconocidas. Si es continuo, el aumento de presión puede afectar seriamente al equilibrio y a la audición de la persona.
Desgraciadamente, la enfermedad de Ménière es bastante común. Se estima que la sufre aproximadamente una de cada dos mil personas y afecta por igual a hombres y mujeres. Normalmente, afecta a personas de 40 a 50 años, pero puede darse también en la infancia o en personas de más de 60 años.
Tratamientos de la enfermedad de Ménière
En la mayoría de los casos, la enfermedad de Ménière se trata con medicamentos para el vértigo, de ese modo la enfermedad se hace más llevadera. Una de las últimas opciones de tratamiento es el uso de un dispositivo llamado Meniett, que se coloca en el oído. El Meniett es un aparato que genera impulsos de baja presión a través de un tubo de plástico. Estos impulsos se envían a través de un tubo de ventilación colocado en el tímpano en el oído medio, que al llegar al oído interno equilibra la presión del fluido. El dispositivo Meniett no es apto para todos los pacientes, pero para los posibles candidatos, su uso puede suponer el fin de los vértigos.
La semana próxima volveremos a ocuparnos de otras enfermedades comunes en el oído. Para cualquier duda o aclaración, llámenos al 963 44 66 55 y estaremos encantados de resolverlas.